Comenzar de Nuevo Pt.2

Retomemos.

Mi padre estuvo 1 mes en el hospital y fue al mismo tiempo que yo programé el inicio de mis mentorias con Marisa y Romina.

La de Romina no salió tan bién. Y la de Marisa se pausó.

Una semana después de salir mi padre, tuve mi primer sesión 1a1 con Marisa y me hizo la fatal pregunta: ¿Quién es Lore?

Obviamente yo contesté la diseñadora que hizo tal y tal y tal. Pero Marisa cuál Master en box me dió un gancho al hígado respondiendo: No, eso es lo que haces, eso no es lo que eres. ¿Quién es Lorenza Lee? K.O.

Puedo jurar que sentí que se me nublaba la vista, como cuando te pegas en la cabeza y no sabes ni qué pasó.

Tiempo atrás había platicado con J (mi mejor amiga) acerca de que siempre he considerado mi trabajo, mi “ser” profesional como lo más importante en mi vida. Tengo un alto grado de exigencia conmigo misma en ese sentido. Prácticamente era/es mi razón de vivir.

Marisa vino a patear la jaula (como dicen las dragas) con una sonrisa y la mejor intención. Así que en mi cabeza era una imagen extraña de alguien que te está jodiendo la vida amablemente ¡jajajajajaja!

Ok, no me respondas eso, ¿Cuál es tu propósito? Pero no de negocio, ¿cuál es tu propósito de vida? Are you kidding me? 😰

¡No tengo ni puta idea! ¿de qué me hablas?

Terminó la sesión. Y no miento cuando digo que llore por una semana entera.

Yo que pensé que tenía mi vida resuelta y que solo estaba buscando mejorar lo ya establecido. 

Quedamos en reunirnos la siguiente semana, así que tenía 8 días para juntar y pegar, entre lágrimas 😪, los pedacitos de Lore que quedaron regados por todo el piso.

¿Quién es Lore? ¡La diseñadora! No, no, no. ¿Quién es Lore? 😭😭😭😭😭

Me puse a trabajar, tenía muchas cosas pendientes después de irme por un mes. Un mes en el que prácticamente no hice nada, solo unos archivos para un empaque de gel antibacterial y toallitas desinfectantes…

Un momento, ¿qué estoy haciendo? O sea si, soy diseñadora, y soy capaz de hacer gráfico, moda, arquitectura, interiorismo, mobiliario urbano, animación, vídeo. ¡Pero soy industrial! 

Back to basics. ¿Por qué decidí estudiar diseño industrial? ¿Por qué amo tanto (a nivel obsesión) diseñar, crear cosas? 😳😱 ¡Ya entendí!

No cabía la felicidad en mi, fue como si rejuveneciera 10 o 20 años. De verdad sentí la emoción recorrer mi cuerpo.

Justo al mismo tiempo entendí lo que Romina me decía y por qué estaba “desperdiciando” mi tiempo, mi talento, mi experiencia.

El hecho de que sea buena haciendo (por ejemplo) diseño gráfico, no me obliga a hacerlo. Ni siquiera el hecho de ser diseñadora industrial, ser buena en ello, haber ganado premios, tener grandes proyectos, NO me obliga a seguir en esto. ¡No soy lo que hago!

¡Renuncio! ¡Sí, me renuncio a mi misma! Jajajajaja

Ok, ok, ok. Tranquila, primero lo primero. Tus clientes te apoyaron en este periodo del papá hospitalizado. Aguantaron vara. No les debo nada jajajajaja. No aguanta, sé la profesional que dices ser.

Entonces terminé todos los pendientes y hablé con cada uno para cerrar la colaboración. Gracias miles, me voy. Me renuncié, ya no tengo diseñadora jajajajaja.

¡Perfecto! ¿Y ahora qué? No has respondido las preguntas de Marisa. Solo te dejaste sin ingresos 😓 jajajajaja.

Eso no es taaaaan cierto. Me faltaba hablar con la más importante de mis clientes. La dejé al final porque…pues porque es importante y es mi amiga, mi clientamiga, y ella confía en mí y soy su mano derecha (aunque a veces parezco izquierda). Pero ya llegaremos a eso.

El caso es que las preguntas seguían ahí. No sé si Marisa pensó que yo estaría en esa crisis, o si realmente esperaba que le respondiera las preguntas en la siguiente sesión. Pero yo estaba comprometida al 100.

Ok. Ya me quité la capa de diseñadora. ¿Quién soy? Mmm… ¿soy Lore? ¿Y quién es Lore? Soy… ¿una persona? Aha ¿y? Mmm… ¿soy yo? Jajajajajajaja.

¡Que pinche complicado! ¿Ahora entiendes porque lloré una semana?

Con respecto a la segunda pregunta fue mucho más fácil porque propósitos siempre he tenido. 

Decidí estudiar diseño industrial porque quería hacer ropa y juguetes. Cosa que en 16 años nunca hice 🤦🏽‍♀️ Así que como dicen, nunca es tarde y este es el momento.

Llegué a mi siguiente sesión con Marisa, fresca como lechuga, con una cara nuevo y un brillo intenso en los ojos. Ese brillo que se había apagado mientras “diseñaba” y hacia “lo que más amaba en el mundo”.

Marisa me causarte una crisis muy fuerte, llore toda la semana. Gracias. Ahora viene la mía, ¿Estás lista?